En los últimos días, el número infectados por coronavirus en América del Sur ha seguido creciendo, y los gobiernos de la región han decidido tomar medidas restrictivas muy estrictas. ¿Cómo pretenden los países sudamericanos combatir la pandemia? ¿Qué consecuencias económicas ha enfrentado América del Sur?
El peligroso coronavirus ingresó a América Latina el 26 de febrero, cuando Brasil confirmó el primer caso de la enfermedad en Sao Paulo. Desde entonces, los gobiernos de toda la región han tomado una serie de medidas para proteger a sus ciudadanos y frenar la propagación del nuevo tipo de neumonía.
A partir del 19 de marzo, la mayoría de los casos de infección por el virus COVID-19 en América del Sur se registraron en Brasil, pero el número de casos confirmados en la región continúa creciendo, según datos de los ministerios de salud de los países de la región.
Según el último informe del Ministerio de Salud de Brasil, se han confirmado más de 500 casos en el país y se sospecha de más de 1.200 personas. Chile ocupa el segundo lugar con 348 pacientes en la cuarta fase del virus. El número de los infectados por el nuevo tipo de neumonía en Perú ha aumentado a 155. En Argentina, el número de casos es de 97 personas y 3 muertes. Ya se han identificado más de 100 casos en Colombia, 168 – en Ecuador y 79 – en Uruguay.
Los países con el menor número de pacientes con coronavirus siguen siendo Bolivia y Paraguay. El Ministerio de Salud del Estado Plurinacional de Bolivia registró 15 casos, en Paraguay son 11. En comparación con los países europeos, donde miles de personas ya están afectadas, la situación en la región sudamericana es ciertamente mucho mejor. Sin embargo, los gobiernos de los Estados y la Organización Mundial de la Salud (OMS) temen repetir la “experiencia europea”, a este respecto, desde el principio decidieron introducir una serie de medidas restrictivas duras.
Desde el lunes 16 de marzo, todos los países de la región han declarado un estado de emergencia y decidieron unirse en la lucha contra el peligroso coronavirus. Entonces, ¿cuáles son las medidas comunes introducidas por los gobiernos de los Estados sudamericanos?
• prohibición de celebrar eventos culturales, sociales, deportivos y religiosos masivos para más de 100 personas;
• del 16 al 31 de marzo, clases en instituciones educativas: escuelas y universidades, fueron suspendidas;
• la jornada laboral para los sectores público y privado ahora no tiene un descanso tradicional: de 8:00 a 16:00 (en algunos países de 8:00 a 13:00);
• se ha introducido “toque de queda” en algunos países: de 6 p.m. a 5(6) a.m.;
• muchas empresas transfirieron su personal al modo de operación a distancia;
• hasta el 31 de marzo, los gimnasios, cines y clubes nocturnos estarán cerrados;
• todos los vuelos a destinos europeos están suspendidos;
• hasta el 31 de marzo, los extranjeros que llegan de la zona de riesgo: China, Irán, los países de la Unión Europea (en algunos casos, todos los ciudadanos extranjeros) no serán “permitidos” en la mayoría de las fronteras terrestres entre los países de la región.
En la noche del 18 de marzo, algunos países ya han anunciado la extensión de la cuarentena hasta el 31 de abril. Cabe señalar que el grado de pánico en los países de América del Sur no es tan alto como en los Estados de la UE: los estantes en las tiendas aún no han estado vacíos, y los gobiernos prometen que no habrá interrupciones en el suministro de alimentos. Sin embargo, los latinos se abstienen de besarse cuando se encuentran, se lavan las manos con más frecuencia y pasan más tiempo con sus familias.
Hoy, todos los países de América del Sur, sin excepción, han decidido actuar con prontitud. Los gobiernos han creado sitios web para proporcionar información oficial sobre el virus y las medidas relacionadas. Además, los equipos de respuesta rápida están operando en cada Estado, se han establecido líneas telefónicas directas y se ha establecido el control en aeropuertos, puertos de entrada y fronteras terrestres. Desde el lunes, la mayoría de los países sudamericanos han instado a sus ciudadanos y residentes a ingresar al país, que llegan de las zonas afectadas o en riesgo del mundo, a establecer su propia cuarentena de 14 días, y si los síntomas del virus se desarrollan durante este tiempo, los pacientes deben ir al centro médico.
Según los analistas económicos, sobre todo el coronavirus ya ha afectado al sector turístico, porque en muchos países de América del Sur la temporada alta de visitas a la región ahora está comenzando. Por cierto, desde el lunes todos los parques nacionales, atracciones turísticas y museos ya están cerrados.
Sin embargo, las pérdidas económicas aún no se han evaluado, no solo en los países de América del Sur, sino en todo el mundo en general. Por ejemplo, el mercado bursátil brasileño ya ha caído más de un 7% después de la noticia del primer caso, que fue la mayor depreciación desde mayo de 2017.
En cuanto a otros países de la región, cabe señalar que China es el segundo destino de exportación más grande de Argentina, y el brote de coronavirus ya ha afectado el comercio. Por ejemplo, el 75% de las exportaciones de carne argentina van al país asiático, y el valor de estas exportaciones a China ya ha caído un 33,4% de diciembre a enero. El peso colombiano ha alcanzado un nuevo mínimo, y dado que China es el tercer socio comercial más grande de Colombia, el período de cuarentena puede desacelerar el crecimiento del PIB de Colombia en un 0,35%. El Ministro de Finanzas de Chile, por el contrario, dijo el 11 de marzo que el impacto económico del brote de coronavirus en la región sería limitado, aunque China, el principal socio comercial del país sudamericano, es el destino de un tercio de la exportación chilena. Según cifras oficiales, los economistas de “Citibank” elevaron a Chile a la cima del índice de vulnerabilidad debido a la forma en que el virus COVID-19 puede afectar la cadena de suministro de bienes, así como a la volatilidad del mercado. China también es el principal socio comercial de Perú, con un 30% de las exportaciones estatales destinadas al país asiático. Perú, junto con Chile, es considerado la economía latinoamericana más vulnerable debido al coronavirus.